
“Nadie va a ser expulsado del país por colgarse del cable”
El secretario de Justicia, Julián Álvarez, justificó la posible deportación de extranjeros que delinquen, pero explicó que sólo será por delitos flagrantes. Abrió la opción de debatir la cantidad de miembros de la Corte.
“No se va a aplicar a delitos insignificantes, nadie va a ser expulsado del país por colgarse del cable“, aclaró Julián Álvarez en una entrevista con Página/12. “El articulado dice lo siguiente: cuando un extranjero, en condición irregular, no cualquier extranjero, comete un delito en flagrancia, es decir que lo agarran con las manos en la masa, en el momento en que lo está cometiendo, ¿qué salida le vas a dar? La expulsión del país“, repasó.
El funcionario defendió al iniciativa con el ejemplo de lo que sucede en otros países: “Es algo que está presente en numerosas legislaciones del mundo”. Y les respondió a quienes señalan que es una medida xenófoba: “Esto no afecta nuestra política migratoria, los vínculos con la Patria Grande, la ampliación de derechos a los migrantes. Además, en esos casos, la expulsión es una de las soluciones posibles, de acuerdo con lo que decida el fiscal de la causa, con la opinión de la propia persona, teniendo en cuenta cuestiones como el arraigo familiar del individuo, entre otras situaciones”.
“Esta norma está dirigida a quienes ingresan al país para robar, punto“, resumió Álvarez, que se quejó porque considera que el kirchnerismo promueve “una transformación global del sistema jurídico argentino, pero lamentablemente se lo analiza en términos coyunturales: si es el momento, si no es el momento”.
“El esquema legislativo que estamos generando es estructural y para esta época, la del Bicentenario. La respuesta a esto son chicanas“, criticó el secretario de Justicia. “Cuando mandamos el fuero del consumidor dijeron que íbamos a entrar a los campos a expropiar la soja; cuando mandamos el Código Civil dijeron que íbamos a entrar a los bancos a secuestrar los dólares. Ahora con el Procesal Penal, dicen que buscamos garantizar la impunidad. Esas son chicanas, no críticas. Como decir que el código es muy de izquierda o es muy de derecha”, repasó.
Además, el representante del gobierno nacional se refirió a la actualidad de la Corte Suprema (sufrió dos bajas en 2014 y próximamente sumará una tercera) y dejó abierta la posibilidad de discutir cuántos miembros deben integrarla.
“Si uno analiza los debates de los legisladores, sobre todo de la oposición, en relación con esto, uno ve a todo el arco político pidiendo que la Corte tenga siete miembros. Toda la oposición ya dijo que el número para la Corte era de siete miembros y nosotros conocemos una Corte funcionando así. No me corresponde a mí opinar, sino cumplir con la ley. Pero bienvenidos sean los debates sobre cómo va a funcionar nuestra democracia“, completó.